Por: POR JESÚS SALCEDO
Es sencillo acudir hasta un minisuper y comprar una bolsa preparar el fin de semana una suculenta carne asada.
Hay varias técnicas para prender el carbón, unas más laboriosas que otras y aunque todas son efectivas, pocas veces a meditar ¿cómo se hace el carbón? o ¿de dónde proviene?
La fabricación de carbón vegetal se desarrolla en varias comunidades rurales de esta comarca en forma por demás
Viven de esa actividad decenas de campesinos que se han visto obligados a convertirse en ?carboneros? suficiente para trabajar sus tierras de cultivo y aún cuando la fabricación de carbón les deja muy pocos ingresos, hablando con respecto al tiempo que invierten en la actividad y al trabajo que representa, los campesinos lo toman
permite sobrevivir a ellos y a sus familias.
Si un jefe de familia se decide convertirse en carbonero, regularmente iniciará su actividad a las seis de la mañana, llanura, cortando ramas de mezquite y haciendo grandes tercios que a lomo de burro llevará hasta un área
para acumular la leña.
Las ramas o troncos de mezquite, son de aproximadamente dos metros de largo y en promedio de cinco
limpian esas ramas de las espinas que regularmente traen y se dejan secando.
El acopio de leña, para un solo campesino dura unas dos semanas, ya que hay la necesidad de reunir al menos de ramas de mezquite, para que una vez procesado se pueda obtener aproximadamente una tonelada de carbón.
Don Benito Juárez, campesino de ese ejido, explica que la labor de recolección de leña es ardua, pero más aún carbón, ya que la técnica es totalmente rudimentaria.
Una vez que se han reunido las cuatro toneladas de leña, se hace una pirámide hueca, poniendo los troncos parados con otros, como si fuera una tienda de los indios ?piel roja?.
A esa pirámide se le da el nombre de ?chivete? y una vez que se han formado perfectamente los troncos de mezquite en el centro de la formación, en el cual habrá ramas y hierba secos, se procederá a cubrir el ?chivete? con hierbas
Puede ser cualquier tipo de hierba o de zacate, dice el campesino, quien agrega que una vez cubierto el ?chivete?, perfectamente con tierra.
En la parte superior se dejan pequeños orificios como respiraderos y aproximadamente 30 centímetros más abajo así en forma equidistante hacia abajo.
El carbón ya casi está a punto para que ponga a asar la carne y las cebollas, pero ha meditado ¿cuánto tuvo que para que usted cómodamente pueda disfrutar de ese platillo preparado a las brasas?.
Una vez cubierto el ?chivete? con tierra, se prende fuego a través de la ?puerta? que se dejó en la parte inferior
tiene acceso a la hierba y madera secos que se dejaron en el centro de la pirámide.
Al prender, el fuego tiende a subir y primero emana del ?chivete? un humo negro, como consecuencia de la hierba quemando, pero en la medida que esta se consume, sale un humo blanco o azuloso.
Lo primero que se empieza a quemar son las puntas más altas y es en esa área en donde los pequeños orificios permiten que salga el humo para que el fuego no se apague, pero impiden que entre aire, para que la
se consuma totalmente y quede pura ceniza.
En la medida que va bajando el fuego, las otras ventanas o respiraderos estarán cumpliendo su cometido y a humo, para permitir que la combustión continúe hasta llegar al suelo.
El proceso de quema de carbón dura entre 24 y 48 horas y es necesario estarlo vigilando con la finalidad de que el ?chivete? porque de ser así, la combustión de la leña será total y en lugar de carbón, se tendría una pila
Una vez que se terminó la quema, hay que esperar al menos otras 24 horas a que se enfríe el ?chivete? y proceder deshacerlo, separando los trozos de carbón para lograr su total enfriamiento y proceder luego a encostalarlo para en donde será comercializado.
De acuerdo a los datos de don Benito Juárez, el carbón se le compra al campesino a razón de dos pesos a centavos, por lo que obtiene unos dos mil trescientos pesos por una tonelada de carbón que le llevó en procesar; dos semanas de recolección de leña y una semana más entre la formación y quema del ?chivete?.
Hay ?coyotes?, dice el entrevistado que vienen desde Torreón y de Gómez a comprar el carbón, aunque ya porque los campesinos de esta comunidad se han organizado y ya cuentan con una cooperativa en la que acopian campesinos de cinco comunidades ejidales y ellos llevan hasta centros comerciales el producto, con la finalidad precio.
Ignora el entrevistado a cómo logran vender el carbón, aunque indica que es muy barato y apenas les alcanza mal comer.
No temen los campesinos terminar en corto plazo con la materia prima del carbón que son los mezquites, ya recibido orientación por parte de la Comisión Nacional de Zonas Áridas y de la Semarnat con la finalidad de mezquites sean planeados, esto es que corten solamente ramas laterales y bajas, lo que equivale a una poda planificada, pero sin acabar con el tronco principal para que el árbol siga desarrollándose.
Lo que sí es cierto, es que cada día los carboneros deben alejarse más de la comunidad para conseguir leña, ya que se ha ?podado?, no retoñan de la noche a la mañana y debe dejárseles en condiciones de que se recuperen, hay que caminar más para traer la leña.
En las tiendas de autoservicio, en Torreón o cualquier parte de la Comarca Lagunera, se encuentran bolsas de peso y su precio oscila entre los 28 a los 35 pesos, dependiendo de la marca. La mayor parte de ese dinero, intermediarios que solamente se dedican a empacar el carbón en bolsas de papel grueso, pero al campesino que la mañana a recoger leña, es mínimo lo que le reditúa.
Segunda tecnicas
Carbón vegetal
Fiestas y Tradiciones
La elaboración de carbón vegetal consiste, básicamente en el proceso de carbonizar la madera, sin que arda. En la comarca del Arlanza suele hacerse de encina (en Castrovido nos dicen que la hacían de estepa).
El proceso, a grandes rasgos, es el siguiente:
Se cortan las encinas en pequeños trozos (de 40 a 60 cm.) y se acarrean al lugar donde se va a hacer el horno.
La preparación de la hornera comienza con la construcción del castillejo (un entramado de palos cruzados que alcanza una altura de 70 cms. y que sirve para crear un apoyo sobre el que iniciar la hornera). En el centro del castillejo se introduce un palo largo (de encina o roble), llamado Urga o Perico.
La primera capa (o cañada) se hace con los palos más finos (rabos). Sobre ésta, se coloca una segunda cañada (llamada sobrepie) con troncos más gordos. Y sobre ésta, se van levantando sucesivas cañadas, al tiempo que se va alzando el urga.
Cuando el horno ya está levantado, se rellenan los huecos con palos delgados, de manera que la cupula quede uniforme.
En la base del horno, en todo su perímetro, se colocan grandes piedras, distantes entre sí medio metro (aprox.). En el hueco que queda entre una y otra, se abren bocas.
Se tapiza todo el horno y se cubre con tierra, apelmazándola. Se saca el Urga o Perico, dejando la boca del horno libre.
Es hora de prender el horno. Se meten por la boca del horno unos palos cruzados y se echan encima buenas ascuas, para que se inicie la cocción. Se tapa la boca con un césped y se dejan abiertas las bocas de abajo.
El primer día es necesario atender el horno cada poco rato, a fin de que coja fuerza. Se destapa el césped y se alimenta con leña.
La combustión se propaga de arriba abajo y hacia el exterior.
El proceso que ahora sigue es delicadísimo. Es preciso conocer como trabaja un horno para poder atenderlo bien (alimentarlo cuando le hace falta, abrir boqueras, cerrarlas...)
El carbón tarda en hacerse unas tres semanas, dependiendo del tamaño del horno y del cuidado que se le dé. Pasado este tiempo, se dice que ha dao la caída el horno, ha reducido su volúmen y se ha achatado. El carbón está hecho.
El proceso de extracción del carbón pasa por ir retirando la tierra, dejando que se cuele entre la madera, para terminar de apagar el rescoldo que quede en el fondo de la hornera.
Producción Una hornera suele producir mil arrobas de carbón (1 arroba=11,5 kilos; o sea, produce 11.500 Kg.). Para conseguir 1 arroba de carbón, hacen falta 4 o 5 arrobas de leña.
La antiquísima técnica de elaborar carbón vegetal.
En Retuerta, Castroceniza y Mecerreyes se hace con leña de encina.
En la zona de la Sierra se hacía con estepa.
Esta actividad tradicional se está perdiendo para siempre. Aún queda algún carbonero en nuestros montes, pero la dureza de este trabajo acabará por exterminar la Elaboración del Carbón Vegetal.
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